Comienza este día con tu corazón rebosante de amor, alegría y agradecimiento, gozoso de estar vivo, haciendo lo que estás haciendo, estando donde estás y viendo emerger la perfección de este día. Benditos sean aquellos que pueden ver la belleza en cada gesto, en cada cosa y hasta en un simple suspiro. Vive con alegría y optimismo, y verás cómo todo lo demás llega solo.