Yo decido ser feliz, tú también puedes hacerlo. Tú decides, la elección es tuya.hoy mismo puedes sentir celos, ira, hostilidad, miedo, culpa, preocupación, vergüenza o resentimiento. Todo esto lo puedes sentir si así lo decides. O TAMBIÁ‰N puedes sentir tranquilidad, esperanza, fe, amor, alegría y otros tantos sentimientos que te den estabilidad cuando decidas pensar en forma optimista y positiva.